Me
permito empezar este artículo, narrando muy brevemente algunos pasajes
históricos que nos ayudarán a entender el empleo del arma aérea. Los globos
fueron los primeros mecanismos usados en
la guerra del aire, su papel fue básicamente el de reconocimiento, siendo
utilizados por primera vez con fines militares en 1794 en la Batalla de
Fleurus, entre Franceses y Austro-Holandes. Los franceses utilizaron el globo,
"l' Entreprenant", para la observación de la batalla, su misión fue
la de informar en todo momento los
movimientos de las fuerzas austriacas.
Años
después, el 17 de diciembre de 1903, los hermanos Wilbur y Oliver Wright lograrían
desarrollar el primer avión, pero no fue hasta la Primera Guerra Mundial, donde
esta máquina demostraría su gran valor militar, su misión consistió inicialmente
en vuelos de reconocimiento, convirtiéndose en los "ojos" de las
fuerzas propias. Sin embargo rápidamente pasaría a cumplir otras misiones, como
apoyo a las fuerzas en tierra, atacando al enemigo desde el aire, así
aparecerían los primeros bombarderos, y posteriormente los aviones interceptores o cazas, la evolución
fue rápida, y en un corto periodo de tiempo ya la aviación se había convertido
en el arma aérea por excelencia, no había
ejército en el mundo que no contase con medios aéreos o por lo menos aspirase a
tenerlos.
Fue
durante la Segunda Guerra mundial que el arma aérea llegaría a su máximo
esplendor, por su alcance, velocidad, maniobrabilidad, flexibilidad, y sobre
todo porque permitiría una gran penetración en territorio enemigo, para atacar
sus áreas vitales o centros de gravedad, todo esto confirmaría su importancia y
su uso en diversas misiones. Aparecerían los bombarderos de largo alcance, los caza-interceptores,
los aviones de transporte estratégico, los aviones de inteligencia electrónica,
los que cumplen la función de puesto de comando aéreo, etc.
Con
la evolución del avión aparecería otra nueva máquina, el helicóptero. Si bien
su invención se produjo mucho tiempo antes, fue en 1920, cuando el argentino
Raúl Pateras Pescara y el francés Étienne Oemichen lo perfeccionarían. Años más
tarde en 1942 durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis intentaron producir su
helicóptero FA-61 / FW-61 en serie ya con fines militares, este había establecido
nuevos records de altitud, velocidad y alcance, esta nueva máquina, permitió a los
alemanes usarlos en misiones de reconocimiento, transporte, y evacuaciones
médicas en las zonas de combate (RESCOM); si los bombardeos aliados no hubieran
detenido su fabricación en serie, su participación hubiese sido más decisiva. Años
después el helicóptero revolucionaría el transporte aéreo militar y civil.
Con
el fin de la Segunda Guerra Mundial, no se detendría el avance de la aviación;
la Guerra Fría sería otro factor de desarrollo permanente, y si bien podemos decir
que las Guerras no convencionales fueron una táctica o estrategia utilizada
desde tiempos antiguos, fue durante la Guerra fría con el desarrollo del arma
aérea, que nos permite evaluarla en conflictos como: Vietnam, Camboya y Laos, años
después en el conflicto de Rusia con Afganistán, y más recientemente, con la
Guerra de Golfo. También podemos analizar el empleo del poder aéreo, en los
conflictos casi permanentes entre Israel y el Hezbolá, pero si queremos mencionar
algo más cercano, tenemos a Colombia con la FARC o nuestras propias experiencias
de años de lucha contra Sendero o los narcoterroristas en el VRAEM. Todos estos
conflictos nos han permitido analizar/evaluar el empleo del arma aérea en este
tipo de enfrentamientos, también conocidos como guerra asimétrica, guerra de guerrillas,
guerra prolongada, guerra sucia, guerra irregular, estudios recientes dieron
origen a la aparición de un nuevo término el de “Conflicto de Baja Intensidad
(low intensity conflict),”.
Por ello diremos,
que Vietnam (1959–1975) es el primero de estos enfrentamientos que nos permitirá
analizar la participación del arma aérea en este tipo de guerra no convencional.
En este conflicto podemos observar como el ejército más poderoso de aquel
entonces, con el mayor número de recursos antes visto, y con la tecnología más
reciente, no pudo derrotar a un pequeño ejército mal armado y mal alimentado. El
ejército americano inicio su estrategia en Vietnam tomando como base su poder
aéreo, a través del cual pretendía lograr una victoria rápida, por ello
planifico y ejecutó la operación “Trueno Rodante”, lanzando miles de toneladas
de bombas sobre el enemigo con la intención de eliminarlo, sin embargo,
informes de la CIA confirmarían que fue una de las operaciones más costosas,
pero al mismo tiempo más ineficientes de la historia, los americanos perdieron
más de 900 aviones que fueron derribados por una eficiente defensa aérea, la
estrategia inicial había fracasado, y el desplazamiento de las tropas americanas
en tierra, se convertía en algo cada vez más peligroso como resultado de una
aviación poco efectiva, los ataques de las fuerzas vietnamitas eran cada vez
más devastadores, originando muchas pérdidas de vidas, resultados que presionaban
al gobierno estadounidense.
Con este
panorama desfavorable, los americanos cambiarían su estrategia e introducirían una
nueva arma, el helicóptero, en una proporción nunca antes vista. El helicóptero
les permitiría la movilidad extrema, tanto en el ataque como en la defensa, desde
su puesta en servicio serian derribados 4,320 aeronaves, a pesar de ello, y gracias
al uso de esta nueva máquina, los americanos lograrían detener en parte el
avance del vietcong y reducir sus pérdidas. Años después en Afganistán (1978), los
rusos confirmarían durante sus enfrentamientos contra los rebeldes islámicos
muyahidines, la importancia del empleo del helicóptero en este tipo de guerra
no convencional.
Pero el
desarrollo de la aviación continuo, y fue durante la guerra del golfo que aparecería
una nueva máquina, los vehículos aéreos no tripulados (Droids) con fines
militares, los cuales por sus características adquirirían una gran importancia en
este tipo de enfrentamientos. Estas nuevas máquinas “droids” serían más
económicas, al mismo tiempo no representan ningún peligro para el personal
militar ya que no necesitan tripulantes, por lo tanto no se cansan, no
necesitan comer, no necesitan relevos, su pérdida no afecta la moral de las
fuerzas; su uso varió el empleo de las tácticas y las estrategias existentes.
Esta nueva
tecnología ha conseguido en un corto periodo de tiempo seguir evolucionando,
hoy militarmente también son conocidos como UAVs ahí tenemos al RQ-1 Predator como un ejemplo de esta
nueva tecnología, ¿Son ciencia ficción? No, su uso hoy es diverso, en misiones de patrullaje,
reconocimiento fotográfico, reconocimiento electrónico, bombardeo, apoyo a las
fuerzas de superficie, traslado de personal, material, realizan misiones de rescate
y otras muchas misiones que se le puedan asignar, sin embargo debemos mencionar
que existen desde los más simples para un uso táctico, hasta los más
sofisticados para un uso estratégico, su mejor empleo siempre estará asociado a
desarrollo de tecnología satelital.
Como podemos observar, con el correr del tiempo y el
desarrollo de la tecnología, hemos ido pasando de una aeronave a otra, pero
debemos resaltar que la capacidad de estas máquinas les permite llevar
armamentos con alto poder destructivo, como son: misiles, bombas, cohetes,
cañones, ametralladoras y estas a su vez pueden tener una carga explosiva de
propósito general, fragmentarias, perforantes, incendiarias, carga hueca, sub
municiones (racimo), podrían también llevar armas biológicas y hasta nucleares,
como podemos ver, casi siempre por el poder destructivo de estas armas, ocasionarían
destrucción en un área determinada y daños en un perímetro a la redonda del
lugar de impacto.
Todas estas armas fueron creadas, diseñadas e inventadas
con el propósito de tener el arma más poderosa, que te permita infringir el
mayor daño al enemigo, con el fin de ganar las batallas o guerras. Estas armas han
evolucionado, se han vuelto cada vez más sofisticadas y eficaces, podemos
mencionar algunos ejemplos, como el caso de las bombas MOAB (The Mother of All
Bombs, o Madre de todas las bombas) es un bomba convencional de gran tamaño,
tiene una carga explosiva de cerca de 8.4 toneladas, tiene un radio destructivo
de 140 metros donde cualquier cosa queda vaporizada y no deja ser vivo en 10
kilómetros a la redonda, o las bombas termobaricas (FOAB), su explosión genera
una onda de calor que en su centro puede llegar a los 3000 C°. Destruye toda
estructura de acero o concreto en un perímetro de 300 metros y no deja ningún
ser vivo en 30 kilómetros a la redonda, podríamos mencionar también a las
conocidas bombas atómicas o nucleares con un mayor poder destructivo, como
vemos las armas que llevan estas aeronaves, fueron concebidas para realizar el
mayor daño posible al enemigo.
Después de un exhaustivo análisis de varios
enfrentamientos, así como de las experiencias propias en escenarios de guerra
no convencional, nos permitimos afirmar que en este tipo de guerra la potencia de
las armas utilizadas deja de ser algo relevante, y en algunos casos es hasta
contraproducente; El motivo es que la estrategia de estos ejércitos no
regulares, es acercarse a los poblados en las zonas rurales, para utilizar a la
población como escudo, de esta manera dificulta el accionar de los ejércitos
regulares, y en ocasiones estos malos elementos se infiltran en las ciudades de
las zonas urbanas, por lo que en esos casos las estrategias para combatirlos
deberán tener en cuenta otras consideraciones.
Debemos tener presente, que cuando se utilizan armas que
se lanzan desde un medio aéreo, el cual se desplaza a una gran altura y gran
velocidad, la precisión del disparo siempre estará supeditada a consideraciones
técnicas y de operación. No es lo mismo realizar un ataque con un francotirador
para eliminar a un enemigo potencial, utilizando un solo disparo, el cual permitirá
dañar un objetivo específico, que el empleo de armas mucho más potentes donde
la probabilidad de daños colaterales siempre será más elevada.
Las experiencias vividas nos muestran que estos ejércitos
no regulares también aprenden, y cambia su modo de operar. Hoy buscan que los
ejércitos regulares cometan errores, para ser aprovechados, de esta manera
buscan desprestigiar a las fuerzas armadas o ejércitos regulares, enfrentarlos
con la población o con la opinión internacional. El avance tecnológico permite
una cobertura permanente por parte de los medios de comunicación de estos
enfrentamientos, lo cual es usado por estos malos elementos, para realizar la
denuncia inmediata de cualquier falla o error cometido de manera involuntaria,
haciéndolo ver estos, como una violación contra los derechos humanos.
De la información analizada, podemos obtener las
siguientes conclusiones: primera conclusión, Existe una forma de empleo del
arma aérea cuando enfrenta una guerra convencional, y otra cuando enfrenta un
escenario de guerra no convencional.
Una segunda conclusión, sería la forma de empleo del arma
aérea cuando enfrenta un escenario de guerra no convencional en zonas rurales o
poco poblada, y otra muy claramente definida, cuando enfrenta un escenario de guerra
no convencional en una zona urbana o dentro de las ciudades.
Por ello, diremos, que para atacar a un enemigo que como
estrategia se acerca a los poblados de las zonas rurales, lo que debemos tener
claramente identificada es la posición del enemigo, mejorar la precisión del
ataque, asimismo, utilizar armas con un menor poder destructivo para afectar un
área más reducida.
Actualmente con la intención de reducir los márgenes de
error, se fabrican las conocidas bombas inteligentes, las cuales permiten
mejorar la precisión del ataque; sin embargo estas solo reducen la probabilidad
de daños colaterales, más no los eliminan, otro factor a tener en cuenta, es mientras
más sofisticada o precisa sea la bomba y/o el arma utilizada por la tecnología
que lleva, mayor será su costo, por ello no será muy rentable desde el punto de
vista económico-militar, lanzar indiscriminadamente estas bombas inteligentes. Por
lo tanto, estas armas son más efectivas en guerras convencionales y en este
tipo de guerra no convencional donde no es fácil conocer la ubicación exacta
del enemigo, su uso será restringido a blancos de alto valor militar o
estratégico.
Como tercera conclusión, el uso de las armas aéreas en
escenarios de guerra no convencional en zonas rurales o poco pobladas, deberá limitarse
a misiones de reconocimiento, inteligencia, patrullaje, evacuaciones,
inserciones/extracciones asimismo, su uso para misiones de bombardeo o ataque, deberá
ser limitado y adecuadamente planeado, puesto
que la posibilidad de daños colaterales siempre será elevada.
Como cuarta conclusión, diremos que el uso de las armas
aéreas en escenarios de guerra no convencional en zonas urbanas o dentro de las
ciudades, deberá limitarse a misiones de reconocimiento, inteligencia,
patrullaje y evacuaciones.
Asimismo existen misiones que podrían ser desarrolladas
con mayor efectividad por medios aéreos, tales como:
Misiones de reconocimiento visual, fotográfico y
electrónico, el hecho de realizarlas desde el aire, en geografías accidentadas y
hostiles, donde sería imposible hacerlo por tierra, y donde nos permite obtener
información detallada y precisa de la zona de operación en un corto periodo de tiempo,
contribuirá de manera eficiente, para la obtención de información que se
trasformara en inteligencia, lo que
facilitará la toma de decisiones, estas misiones se podrían realizar con aviones,
helicópteros o UAVs.
Misiones de inserción y extracción de las tropas, permiten la sorpresa táctica a
nuestras fuerzas terrestres o fuerzas especiales, son determinantes para el
éxito de una operación militar, permiten no desgastar al personal ni exponerlo
innecesariamente, al extraerlo de las zonas de alto riesgo de manera oportuna,
son realizadas básicamente por helicópteros en áreas reducidas y con geografías
hostiles y agrestes.
Misiones de rescate de heridos o evacuaciones aeromédicas, el medio aéreo permitirá
realizarlas mucho más rápido, en circunstancias donde el tiempo es vital para
la salud y supervivencia del herido, el medio aéreo se trasforma en
irremplazable, son muy importantes para mantener la moral del personal, si la
zona donde se encuentra el herido, no cuenta con una pista que posibilite el aterrizaje
de un avión, estas misiones serán realizadas por helicópteros.
Misiones de traslado de personal, cuando el teatro de operaciones
está lejos por tierra de las zona del interior, estas misiones son
indispensables en oportunidad, contribuyen con la seguridad del personal, al
evitar su exposición a viajes largos por tierra en geografías hostiles y
complicadas, son realizadas por aviones en zonas donde existan pistas de
aterrizaje que lo permitan, sino serán realizadas por helicópteros.
Misiones de soporte de la fuerza (logísticas), estás son indispensables para el
sostenimiento de la fuerza, si bien los pertrechos o víveres podrían ser
llevados por tierra, exigiendo un menor esfuerzo económico cuando la situación
lo permita, en ocasiones, y dependiendo del lugar de operación de nuestras
tropas, estas deberán ser realizadas por medios aéreos ya sean aviones o helicópteros
de ser el caso.
Misiones de apoyo de fuego a las fuerzas terrestres, estas son cumplidas
eficientemente por los medios aéreos, por la rapidez con que puede llegar al
lugar del enfrentamiento, sin embargo, la selección de las armas con las que se
brindará el apoyo será determinante, este apoyo será básicamente limitado como
disuasivo, mucho dependerá si la zona de enfrentamiento se encuentra libre de
población civil cercana, si no fuese el caso, el apoyo será restringido.
Estas misiones podrán ser cumplidas por aviones, siempre
y cuando la línea de bombardeo estuviese claramente establecida, si no fuese el
caso y el punto de contacto fuese confuso, se recomienda el empleo de
helicópteros, ya que su posibilidad de maniobrar a menor altura y menor
velocidad, permitirán ubicar e identificar mejor al enemigo, así como a las
fuerza propias, reduciendo la probabilidad de daños colaterales o cometer fratricidio.
Misiones de ataque o bombardeo, estas son las más riesgosas, al
no tener la exigencia imperativa del apoyo a compañeros que se encuentran bajo
ataque, estas deberán ser adecuadamente evaluadas, por las consecuencias que
podrían generar al producirse el mínimo error, asimismo se recomienda que sean autorizadas
por el más alto nivel estratégico para su realización, parte del éxito de ellas,
dependerá de la adecuada selección del medio aéreo a utilizar, estas misiones
podrán ser cumplidas por aviones, sin embargo si la línea de bombardeo no
estuviese claramente establecida, se recomienda el empleo de helicópteros, ya
que la posibilidad de maniobrar a menor altura y menor velocidad serán
determinantes para la ubicación e identificación del punto a atacar.
No puedo dejar de mencionar algo muy importante sobre la
doctrina, y es, que está se basa en cuatro grandes pilares, el primero de ellos
la historia, de donde los estudiosos militares sacan lecciones de guerras
pasadas; el segundo las experiencias propias, en nuestro caso años de enfrentar
a la subversión en diferentes escenarios del país, nos permiten tener
información valiosa que debe utilizarse adecuadamente; el tercer pilar son las
experiencias de países amigos, podemos mencionar el caso colombiano, con
escenarios similares y años de enfrentamiento con la FARC, sus experiencias
deberían ser estudiadas a fin de sacarles el máximo provecho y por último el cuarto
pilar la tecnología, la cual evoluciona constantemente, por lo que debemos conocerla
y utilizarla en beneficio de nuestras operaciones.
Hay algunos militares, que piensan que la doctrina es
como la biblia, y que no puede ser modificada ni cambiada, sin embargó, los
ejércitos modernos revisan su doctrina de manera permanente, afín de realizar
los cambios que sean necesarios. La historia y las experiencias de las últimas
guerras o conflictos, han demostrado que el arma aérea adecuadamente empleada,
ha sido, es y será irremplazable durante enfrentamientos del tipo de guerra no
convencional, asimismo, debemos resaltar lo dicho por el Teniente Coronel (USAF) Andrew S. Kovichun, en su artículo El Poder
Aéreo en las Guerras Pequeñas, publicado en la revista AIR & SPACE POWER JOURNAL “Es
un error clásico el pensar y utilizar el arma aérea en términos de una guerra
convencional, cuando se está enfrentando una guerra no convencional”,
eso es algo que no deberíamos olvidar.
Bibliografía
How the Helicopter Changed
Modern Warfare, Walter J. BoyneVolume 4 Operations, Special
Operations - https://doctrine.af.mil/dnv1vol4.htm
Una guerra sin víctimas, artículo publicado “Revista
Internacional de la Cruz Roja”, por A.P.V. Rogers - http://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/5tdnzd.htm
Covert action in Colombia, U.S. intelligence, GPS bomb kits help Latin
American nation cripple rebel forces - http://www.washingtonpost.com/sf/investigative/2013/12/21/covert-action-in-colombia/
Bombas Inteligentes, artículo publicado BBC de
Londres http://www.bbc.co.uk/spanish/especiales/eeuu_military_hardware/smart_bomb/5.shtml
El Poder Aéreo en las Guerras
Pequeñas - por el Teniente Coronel (USAF) Andrew S. Kovichun - http://www.airpower.maxwell.af.mil/