miércoles, 26 de marzo de 2014

El Arma Aérea y su Utilidad en las Guerras No Convencionales


 
Me permito empezar este artículo, narrando muy brevemente algunos pasajes históricos que nos ayudarán a entender el empleo del arma aérea. Los globos fueron  los primeros mecanismos usados en la guerra del aire, su papel fue básicamente el de reconocimiento, siendo utilizados por primera vez con fines militares en 1794 en la Batalla de Fleurus, entre Franceses y Austro-Holandes. Los franceses utilizaron el globo, "l' Entreprenant", para la observación de la batalla, su misión fue la de  informar en todo momento los movimientos de las fuerzas austriacas.
Años después, el 17 de diciembre de 1903, los hermanos Wilbur y Oliver Wright lograrían desarrollar el primer avión, pero no fue hasta la Primera Guerra Mundial, donde esta máquina demostraría su gran valor militar, su misión consistió inicialmente en vuelos de reconocimiento, convirtiéndose en los "ojos" de las fuerzas propias. Sin embargo rápidamente pasaría a cumplir otras misiones, como apoyo a las fuerzas en tierra, atacando al enemigo desde el aire, así aparecerían los primeros bombarderos, y posteriormente los  aviones interceptores o cazas, la evolución fue rápida, y en un corto periodo de tiempo ya la aviación se había convertido en el arma aérea  por excelencia, no había ejército en el mundo que no contase con medios aéreos o por lo menos aspirase a tenerlos.
Fue durante la Segunda Guerra mundial que el arma aérea llegaría a su máximo esplendor, por su alcance, velocidad, maniobrabilidad, flexibilidad, y sobre todo porque permitiría una gran penetración en territorio enemigo, para atacar sus áreas vitales o centros de gravedad, todo esto confirmaría su importancia y su uso en diversas misiones. Aparecerían los bombarderos de largo alcance, los caza-interceptores, los aviones de transporte estratégico, los aviones de inteligencia electrónica, los que cumplen la función de puesto de comando aéreo, etc.
Con la evolución del avión aparecería otra nueva máquina, el helicóptero. Si bien su invención se produjo mucho tiempo antes, fue en 1920, cuando el argentino Raúl Pateras Pescara y el francés Étienne Oemichen lo perfeccionarían. Años más tarde en 1942 durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis intentaron producir su helicóptero FA-61 / FW-61 en serie ya con fines militares, este había establecido nuevos records de altitud, velocidad y alcance, esta nueva máquina, permitió a los alemanes usarlos en misiones de reconocimiento, transporte, y evacuaciones médicas en las zonas de combate (RESCOM); si los bombardeos aliados no hubieran detenido su fabricación en serie, su participación hubiese sido más decisiva. Años después el helicóptero revolucionaría el transporte aéreo militar y civil.
Con el fin de la Segunda Guerra Mundial, no se detendría el avance de la aviación; la Guerra Fría sería otro factor de desarrollo permanente, y si bien podemos decir que las Guerras no convencionales fueron una táctica o estrategia utilizada desde tiempos antiguos, fue durante la Guerra fría con el desarrollo del arma aérea, que nos permite evaluarla en conflictos como: Vietnam, Camboya y Laos, años después en el conflicto de Rusia con Afganistán, y más recientemente, con la Guerra de Golfo. También podemos analizar el empleo del poder aéreo, en los conflictos casi permanentes entre Israel y el Hezbolá, pero si queremos mencionar algo más cercano, tenemos a Colombia con la FARC o nuestras propias experiencias de años de lucha contra Sendero o los narcoterroristas en el VRAEM. Todos estos conflictos nos han permitido analizar/evaluar el empleo del arma aérea en este tipo de enfrentamientos, también conocidos como guerra asimétrica, guerra de guerrillas, guerra prolongada, guerra sucia, guerra irregular, estudios recientes dieron origen a la aparición de un nuevo término el de “Conflicto de Baja Intensidad (low intensity conflict),”.
Por ello diremos, que Vietnam (1959–1975) es el primero de estos enfrentamientos que nos permitirá analizar la participación del arma aérea en este tipo de guerra no convencional. En este conflicto podemos observar como el ejército más poderoso de aquel entonces, con el mayor número de recursos antes visto, y con la tecnología más reciente, no pudo derrotar a un pequeño ejército mal armado y mal alimentado. El ejército americano inicio su estrategia en Vietnam tomando como base su poder aéreo, a través del cual pretendía lograr una victoria rápida, por ello planifico y ejecutó la operación “Trueno Rodante”, lanzando miles de toneladas de bombas sobre el enemigo con la intención de eliminarlo, sin embargo, informes de la CIA confirmarían que fue una de las operaciones más costosas, pero al mismo tiempo más ineficientes de la historia, los americanos perdieron más de 900 aviones que fueron derribados por una eficiente defensa aérea, la estrategia inicial había fracasado, y el desplazamiento de las tropas americanas en tierra, se convertía en algo cada vez más peligroso como resultado de una aviación poco efectiva, los ataques de las fuerzas vietnamitas eran cada vez más devastadores, originando muchas pérdidas de vidas, resultados que presionaban al gobierno estadounidense. 
Con este panorama desfavorable, los americanos cambiarían su estrategia e introducirían una nueva arma, el helicóptero, en una proporción nunca antes vista. El helicóptero les permitiría la movilidad extrema, tanto en el ataque como en la defensa, desde su puesta en servicio serian derribados 4,320 aeronaves, a pesar de ello, y gracias al uso de esta nueva máquina, los americanos lograrían detener en parte el avance del vietcong y reducir sus pérdidas. Años después en Afganistán (1978), los rusos confirmarían durante sus enfrentamientos contra los rebeldes islámicos muyahidines, la importancia del empleo del helicóptero en este tipo de guerra no convencional.
Pero el desarrollo de la aviación continuo, y fue durante la guerra del golfo que aparecería una nueva máquina, los vehículos aéreos no tripulados (Droids) con fines militares, los cuales por sus características adquirirían una gran importancia en este tipo de enfrentamientos. Estas nuevas máquinas “droids” serían más económicas, al mismo tiempo no representan ningún peligro para el personal militar ya que no necesitan tripulantes, por lo tanto no se cansan, no necesitan comer, no necesitan relevos, su pérdida no afecta la moral de las fuerzas; su uso varió el empleo de las tácticas y las estrategias existentes.
Esta nueva tecnología ha conseguido en un corto periodo de tiempo seguir evolucionando, hoy militarmente también son conocidos como UAVs ahí tenemos al RQ-1 Predator como un ejemplo de esta nueva tecnología, ¿Son ciencia ficción? No, su uso hoy es diverso, en misiones de patrullaje, reconocimiento fotográfico, reconocimiento electrónico, bombardeo, apoyo a las fuerzas de superficie, traslado de personal, material, realizan misiones de rescate y otras muchas misiones que se le puedan asignar, sin embargo debemos mencionar que existen desde los más simples para un uso táctico, hasta los más sofisticados para un uso estratégico, su mejor empleo siempre estará asociado a desarrollo de tecnología satelital.   
Como podemos observar, con el correr del tiempo y el desarrollo de la tecnología, hemos ido pasando de una aeronave a otra, pero debemos resaltar que la capacidad de estas máquinas les permite llevar armamentos con alto poder destructivo, como son: misiles, bombas, cohetes, cañones, ametralladoras y estas a su vez pueden tener una carga explosiva de propósito general, fragmentarias, perforantes, incendiarias, carga hueca, sub municiones (racimo), podrían también llevar armas biológicas y hasta nucleares, como podemos ver, casi siempre por el poder destructivo de estas armas, ocasionarían destrucción en un área determinada y daños en un perímetro a la redonda del lugar de impacto.
Todas estas armas fueron creadas, diseñadas e inventadas con el propósito de tener el arma más poderosa, que te permita infringir el mayor daño al enemigo, con el fin de ganar las batallas o guerras. Estas armas han evolucionado, se han vuelto cada vez más sofisticadas y eficaces, podemos mencionar algunos ejemplos, como el caso de las bombas MOAB (The Mother of All Bombs, o Madre de todas las bombas) es un bomba convencional de gran tamaño, tiene una carga explosiva de cerca de 8.4 toneladas, tiene un radio destructivo de 140 metros donde cualquier cosa queda vaporizada y no deja ser vivo en 10 kilómetros a la redonda, o las bombas termobaricas (FOAB), su explosión genera una onda de calor que en su centro puede llegar a los 3000 C°. Destruye toda estructura de acero o concreto en un perímetro de 300 metros y no deja ningún ser vivo en 30 kilómetros a la redonda, podríamos mencionar también a las conocidas bombas atómicas o nucleares con un mayor poder destructivo, como vemos las armas que llevan estas aeronaves, fueron concebidas para realizar el mayor daño posible al enemigo.
Después de un exhaustivo análisis de varios enfrentamientos, así como de las experiencias propias en escenarios de guerra no convencional, nos permitimos afirmar que en este tipo de guerra la potencia de las armas utilizadas deja de ser algo relevante, y en algunos casos es hasta contraproducente; El motivo es que la estrategia de estos ejércitos no regulares, es acercarse a los poblados en las zonas rurales, para utilizar a la población como escudo, de esta manera dificulta el accionar de los ejércitos regulares, y en ocasiones estos malos elementos se infiltran en las ciudades de las zonas urbanas, por lo que en esos casos las estrategias para combatirlos deberán tener en cuenta otras consideraciones.  
Debemos tener presente, que cuando se utilizan armas que se lanzan desde un medio aéreo, el cual se desplaza a una gran altura y gran velocidad, la precisión del disparo siempre estará supeditada a consideraciones técnicas y de operación. No es lo mismo realizar un ataque con un francotirador para eliminar a un enemigo potencial, utilizando un solo disparo, el cual permitirá dañar un objetivo específico, que el empleo de armas mucho más potentes donde la probabilidad de daños colaterales siempre será más elevada.
Las experiencias vividas nos muestran que estos ejércitos no regulares también aprenden, y cambia su modo de operar. Hoy buscan que los ejércitos regulares cometan errores, para ser aprovechados, de esta manera buscan desprestigiar a las fuerzas armadas o ejércitos regulares, enfrentarlos con la población o con la opinión internacional. El avance tecnológico permite una cobertura permanente por parte de los medios de comunicación de estos enfrentamientos, lo cual es usado por estos malos elementos, para realizar la denuncia inmediata de cualquier falla o error cometido de manera involuntaria, haciéndolo ver estos, como una violación contra los derechos humanos.
De la información analizada, podemos obtener las siguientes conclusiones: primera conclusión, Existe una forma de empleo del arma aérea cuando enfrenta una guerra convencional, y otra cuando enfrenta un escenario de guerra no convencional.
Una segunda conclusión, sería la forma de empleo del arma aérea cuando enfrenta un escenario de guerra no convencional en zonas rurales o poco poblada, y otra muy claramente definida, cuando enfrenta un escenario de guerra no convencional en una zona urbana o dentro de las ciudades.
Por ello, diremos, que para atacar a un enemigo que como estrategia se acerca a los poblados de las zonas rurales, lo que debemos tener claramente identificada es la posición del enemigo, mejorar la precisión del ataque, asimismo, utilizar armas con un menor poder destructivo para afectar un área más reducida.
Actualmente con la intención de reducir los márgenes de error, se fabrican las conocidas bombas inteligentes, las cuales permiten mejorar la precisión del ataque; sin embargo estas solo reducen la probabilidad de daños colaterales, más no los eliminan, otro factor a tener en cuenta, es mientras más sofisticada o precisa sea la bomba y/o el arma utilizada por la tecnología que lleva, mayor será su costo, por ello no será muy rentable desde el punto de vista económico-militar, lanzar indiscriminadamente estas bombas inteligentes. Por lo tanto, estas armas son más efectivas en guerras convencionales y en este tipo de guerra no convencional donde no es fácil conocer la ubicación exacta del enemigo, su uso será restringido a blancos de alto valor militar o estratégico. 
Como tercera conclusión, el uso de las armas aéreas en escenarios de guerra no convencional en zonas rurales o poco pobladas, deberá limitarse a misiones de reconocimiento, inteligencia, patrullaje, evacuaciones, inserciones/extracciones asimismo, su uso para misiones de bombardeo o ataque, deberá ser limitado y adecuadamente  planeado, puesto que la posibilidad de daños colaterales siempre será elevada.
Como cuarta conclusión, diremos que el uso de las armas aéreas en escenarios de guerra no convencional en zonas urbanas o dentro de las ciudades, deberá limitarse a misiones de reconocimiento, inteligencia, patrullaje y evacuaciones.
Asimismo existen misiones que podrían ser desarrolladas con mayor efectividad por medios aéreos, tales como:
Misiones de reconocimiento visual, fotográfico y electrónico, el hecho de realizarlas desde el aire, en geografías accidentadas y hostiles, donde sería imposible hacerlo por tierra, y donde nos permite obtener información detallada y precisa de la zona de operación en un corto periodo de tiempo, contribuirá de manera eficiente, para la obtención de información que se trasformara en  inteligencia, lo que facilitará la toma de decisiones, estas misiones se podrían realizar con aviones, helicópteros o UAVs.
Misiones de inserción y extracción de las tropas, permiten la sorpresa táctica a nuestras fuerzas terrestres o fuerzas especiales, son determinantes para el éxito de una operación militar, permiten no desgastar al personal ni exponerlo innecesariamente, al extraerlo de las zonas de alto riesgo de manera oportuna, son realizadas básicamente por helicópteros en áreas reducidas y con geografías hostiles y agrestes.
Misiones de rescate de heridos o evacuaciones aeromédicas, el medio aéreo permitirá realizarlas mucho más rápido, en circunstancias donde el tiempo es vital para la salud y supervivencia del herido, el medio aéreo se trasforma en irremplazable, son muy importantes para mantener la moral del personal, si la zona donde se encuentra el herido, no cuenta con una pista que posibilite el aterrizaje de un avión, estas misiones serán realizadas por helicópteros.  
Misiones de traslado de personal, cuando el teatro de operaciones está lejos por tierra de las zona del interior, estas misiones son indispensables en oportunidad, contribuyen con la seguridad del personal, al evitar su exposición a viajes largos por tierra en geografías hostiles y complicadas, son realizadas por aviones en zonas donde existan pistas de aterrizaje que lo permitan, sino serán realizadas por helicópteros.    
Misiones de soporte de la fuerza (logísticas), estás son indispensables para el sostenimiento de la fuerza, si bien los pertrechos o víveres podrían ser llevados por tierra, exigiendo un menor esfuerzo económico cuando la situación lo permita, en ocasiones, y dependiendo del lugar de operación de nuestras tropas, estas deberán ser realizadas por medios aéreos ya sean aviones o helicópteros de ser el caso.
Misiones de apoyo de fuego a las fuerzas terrestres, estas son cumplidas eficientemente por los medios aéreos, por la rapidez con que puede llegar al lugar del enfrentamiento, sin embargo, la selección de las armas con las que se brindará el apoyo será determinante, este apoyo será básicamente limitado como disuasivo, mucho dependerá si la zona de enfrentamiento se encuentra libre de población civil cercana, si no fuese el caso, el apoyo será restringido.
Estas misiones podrán ser cumplidas por aviones, siempre y cuando la línea de bombardeo estuviese claramente establecida, si no fuese el caso y el punto de contacto fuese confuso, se recomienda el empleo de helicópteros, ya que su posibilidad de maniobrar a menor altura y menor velocidad, permitirán ubicar e identificar mejor al enemigo, así como a las fuerza propias, reduciendo la probabilidad de daños colaterales o cometer fratricidio. 
Misiones de ataque o bombardeo, estas son las más riesgosas, al no tener la exigencia imperativa del apoyo a compañeros que se encuentran bajo ataque, estas deberán ser adecuadamente evaluadas, por las consecuencias que podrían generar al producirse el mínimo error, asimismo se recomienda que sean autorizadas por el más alto nivel estratégico para su realización, parte del éxito de ellas, dependerá de la adecuada selección del medio aéreo a utilizar, estas misiones podrán ser cumplidas por aviones, sin embargo si la línea de bombardeo no estuviese claramente establecida, se recomienda el empleo de helicópteros, ya que la posibilidad de maniobrar a menor altura y menor velocidad serán determinantes para la ubicación e identificación del punto a atacar.
No puedo dejar de mencionar algo muy importante sobre la doctrina, y es, que está se basa en cuatro grandes pilares, el primero de ellos la historia, de donde los estudiosos militares sacan lecciones de guerras pasadas; el segundo las experiencias propias, en nuestro caso años de enfrentar a la subversión en diferentes escenarios del país, nos permiten tener información valiosa que debe utilizarse adecuadamente; el tercer pilar son las experiencias de países amigos, podemos mencionar el caso colombiano, con escenarios similares y años de enfrentamiento con la FARC, sus experiencias deberían ser estudiadas a fin de sacarles el máximo provecho y por último el cuarto pilar la tecnología, la cual evoluciona constantemente, por lo que debemos conocerla y utilizarla en beneficio de nuestras operaciones.
Hay algunos militares, que piensan que la doctrina es como la biblia, y que no puede ser modificada ni cambiada, sin embargó, los ejércitos modernos revisan su doctrina de manera permanente, afín de realizar los cambios que sean necesarios. La historia y las experiencias de las últimas guerras o conflictos, han demostrado que el arma aérea adecuadamente empleada, ha sido, es y será irremplazable durante enfrentamientos del tipo de guerra no convencional, asimismo, debemos resaltar lo dicho por el Teniente Coronel (USAF) Andrew S. Kovichun, en su artículo  El Poder Aéreo en las Guerras Pequeñas, publicado en la revista  AIR & SPACE POWER JOURNAL “Es un error clásico el pensar y utilizar el arma aérea en términos de una guerra convencional, cuando se está enfrentando una guerra no convencional”, eso es algo que no deberíamos olvidar.

Bibliografía

How the Helicopter Changed Modern Warfare, Walter J. BoyneVolume 4 Operations, Special Operations - https://doctrine.af.mil/dnv1vol4.htm
Una guerra sin víctimas, artículo publicado “Revista Internacional de la Cruz Roja”, por A.P.V. Rogers -  http://www.icrc.org/spa/resources/documents/misc/5tdnzd.htm
Covert action in Colombia, U.S. intelligence, GPS bomb kits help Latin American nation cripple rebel forces - http://www.washingtonpost.com/sf/investigative/2013/12/21/covert-action-in-colombia/
Bombas Inteligentes, artículo publicado BBC de Londres  http://www.bbc.co.uk/spanish/especiales/eeuu_military_hardware/smart_bomb/5.shtml
El Poder Aéreo en las Guerras Pequeñas - por el Teniente Coronel (USAF) Andrew S. Kovichun - http://www.airpower.maxwell.af.mil/